¡¡Hola de nuevo desde Malta!! Ya vamos cogiendo ritmo, rutina y colorcito, y cada día se convierte en una nueva historia digna de contar… ¡y recontar cuando volvamos a casa!
Viernes 11 de julio – Clases, paseos y fuegos artificiales sorpresa
Este viernes empezamos el día con un pequeño regalo: ¡unos minutitos más de sueño! Desayunamos a las 7:45 y a las 8:45, como clavos en clase, dispuestos a aprovechar el último día lectivo de la semana junto a sus compañeros internacionales que ya se despedían.
Tras las clases, pusimos rumbo a Bay Street y St. Julian’s Beach. Nos acercamos a la playa, pero decidimos quedarnos por la zona comercial: tiendas, calles animadas, algún café, algún helado (o varios). ¡Plan alternativo aprobado!
A las 15:15, vuelta al hotel, y de 16:00 a 19:15 disfrutaron de un rato libre de esos que sientan genial. Piscina, siesta, y... ¡las primeras lavadoras! Con algo de ayuda, eso sí, porque el dilema “¿esto va con agua fría o caliente?” fue trending topic del día.
Después de la cena, excursión nocturna a Birgu, un lugar precioso con vistas al atardecer. Tenían que completar un pequeño juego de preguntas y fotos. Pasearon por la zona, hicieron alguna comprita... y a las 22:00 vuelta al autobús.
Pero… ¡plot twist! Esta vez el bus nos dejó un pelín más lejos, y de camino vimos fuegos artificiales y una charanga tocando por la calle. No sabíamos si aplaudir, bailar o ¡ambas cosas!
Sábado 12 de julio – Relax, chapuzones infinitos y paseo por la costa
Hoy no había clases, así que ¡día libre desde por la mañana! Algunos desayunaron más tarde en sus habitaciones, otros fueron a su ritmo, y todos estaban más relajados que nunca.
¿Y la actividad de la mañana? ¡Piscina! Porque no hay nada mejor que pasar el sábado flotando con amigos. De hecho, se quedaron toda la jornada entre el agua, las hamacas, y las cartas de siempre. Descanso merecidísimo.
A eso de las 18:00, algunas chicas se acercaron a ver unas tiendas de souvenirs cercanas, y volvieron justo a tiempo para la cena de las 19:15.
Después de cenar, cogimos el autobús rumbo a Buggiba Waterfront, un paseo marítimo muy chulo, el cual nuestra mascota Kiwi no se quiso perder. Una vez allí, disfrutamos de un paseo tranquilo al atardecer, más fotos, más helado (¡por supuesto!).
Domingo 13 de julio – Mercadillo, piscina non-stop y un asesino entre nosotros…
Este domingo ha sido el día oficial de la marmota: nadie bajó a desayunar. Pero literal. Querían descansar y lo respetamos porque la semana había sido intensa!
A las 10:00, salimos hacia nuestra actividad del día: el mercadillo de Marsaxlokk. Ropa, souvenirs, cositas artesanas… y calorcito. Cada uno fue a su aire: viendo los puestos, buscando sombra, tomando algo en las terrazas, y alguno incluso volvió con regalitos para casa (guiño guiño ;)).
A las 13:00 estábamos de vuelta y ¡adivinad! Sí, otra tarde de piscina (y más lavadoras). La piscina de Malta ya casi nos tiene empadronados.
Por la noche, sports night. Mientras algunos se unieron a un partidazo de fútbol con otros estudiantes internacionales (no se sabe quién ganó, pero hubo sudor y honor), el resto jugamos a El Pueblo Duerme, un clásico de misterio, intriga y acusaciones falsas. Mucha risa, algún grito de traición, y bastante debate sobre quién era el asesino… ¡Spoiler! Kiwi no era.
A las 22:15, vuelta al hotel —más rápida esta vez— para coger fuerzas para la semana que nos espera… porque esto sigue, y ¡¡¡promete aún más!!!
¡¡¡Un abrazo muy grande a todos!!!
Cheers! :)
