Hola a tod@s!!
Un placer dirigirme a todos vosotro durante este último mes, pero antes de nada os tengo que contar el maravilloso segundo viaje a Nueva York, para ser precisos, a la zona de Lower Manhattan.
Como ya era habitual, otro madrugón más se avecinaba, pero ya era el último y el esfuerzo había que hacerlo, ya que otro viaje a la gran manzana lo merecía. A las seis y media de la mañana pusimos rumbo a NY, llegamos y comenzamos nuestra andadura cogiendo el ferry de State Island, donde pasamos muy cerca de la famosa e icónica Estatua de la Libertad. He de decir que vista de muy cerca es maravillosa y aun más grande.
A la vuelta del ferry, nos dirigimos a la zona de Wall Street, donde se sitúa toda la zona bancaria, y aparte de eso nos sacamos fotos con el famoso toro de Wall Street, The Bull. Por la zona de Wall Street, nos dio tiempo a comprar los últimos souvenirs y almorzar en un clásico como el McDonald's, algo mas americano no había.
Seguimos rectos hasta toparnos con la zona zero o Ground Zero, donde ocurrió el suceso del 11 de septiembre de 2001. He de decir que el respeto hacia todas las familias afectadas se podía respirar en el ambiente y, cómo no, ese silencio también lo representaron nuestros EMYs.
Parecía que la lluvia y la tormenta iba a caer, pero nos dio tiempo a pasar y sacarnos las ultimas fotos para el recuerdo con las increíbles vistas de todos los rascacielos de NY a las espaldas en el famoso Brooklyn Bridge. ¡Que espectáculo de vistas! Y ya cuando daba igual, dentro del bus a la vuelta, la tormenta hizo presencia, y vaya si la hizo, vaya manera de llover.
Pues nada esto se acababa y la aventura llegaba a su fin, pero antes de nada los EMYs tuvieron un último día para disfrutar y aprovechar con sus familias, eso sí, cada uno a su manera: cenas familiares, compras, visitas…
Llego el día que no queríamos que nunca llegara, el día de la despedida, por una última vez nos reunimos en el ya habitual parking, pero esta vez las caras eran de pena ya que los caminos se separaban.
Los lloros hicieron presencia, en todos y cada uno de ellos, pero como es rutina, siempre es bueno despedirse con un see you soon, ya que la vida da muchas vueltas y cuando menos te lo esperas los caminos se vuelven a juntar. Las familias fueron increíbles durante todo el mes y así se reflejó en el último adiós, nadie se quería subir al autobús.
Finalmente, y con muchísima pena y nostalgia, pusimos rumbo al JFK junto a la coordinadora Debbie y su hija Danielle, que estuvieron junto a nosotros hasta el último momento, y a las que le agradecimos absolutamente todo. Llegamos al aeropuerto con antelación por lo que nos dio tiempo a comer algo, y ahora si que si comprar los ultimísimos detalles.
Ya en el avión rumbo a Amsterdam nos dio tiempo a absolutamente de todo, dormir, jugar a cartas, ver películas, incluso algun@ dio algún que otro paseo por el avión. Aterrizamos en Holanda pronto por la mañana, y tuvimos hora y media para desayunar y descansar. Por ultimo, y ya en Bilbao, las ganas de ver a nuestras familias cada vez estaban más presentes, pero antes de eso tocaba despedirnos entre nosotr@s ¡Vaya momentazo, qué emotivo!
Agradecidos a cada uno de los EMYs absolutamente por todo lo vivido y agradecer a los padres y madres por los hij@s tan maravillos@s que teneis.
Esto se acaba y antes de poner punto final me gustaría que sigáis atent@s al último post.
Un saludo, no os perdáis el siguiente post.
Iker.
